Las Escuelas Necesitan Cambios Ante los Efectos de la Pandemia

La pandemia ha traído consigo grandes transformaciones en nuestra vida y entre ellas está la educación escolar de nuestros hijos. En esta oportunidad queremos compartirles las opiniones del Profesor Francesco Tonucci, educador y pedagogo, sobre los cambios que a su criterio, deberían hacerse en los centros educativos. Cambios que deberían discutirse y evaluarse conjuntamente entre la ciudad, la escuela, la familia y los niños. Hacer un debate compartido.

  • ¿Cuál es el giro que deberían dar los centros educativos?

«Los niños no pueden quedarse todos en un aula, frente a un maestro, sino formar parte de grupos independientes que trabajen por su cuenta como pasaba antiguamente. A esa imagen de escuela, que era la buena escuela de los buenos maestros de siempre, es muy fácil volver hoy en día con la pandemia porque un grupo puede estar en el pasillo y otro grupo en la clase, y reforzar así la autonomía que se ha perdido.«

«El Artículo 29 de la Convención sobre los Derechos del Niño habla de que el objetivo de la educación es el desarrollo de la personalidad de los niños, de sus aptitudes, hasta el máximo de sus posibilidades. Ese es el objetivo que deben tener la familia y la escuela respecto a la educación y no el conseguir unos resultados previstos o evaluar a los niños respecto a lo que rindieron.»

  • ¿La pandemia podría hacernos despertar?

«Todas las veces que hay un trauma fuerte nos ponemos frente a la posibilidad de cambios.«

«Hoy las escuelas están pidiendo a la ciudad espacios vacíos para repartir los alumnos, pero a mí me gusta pensar que la ciudad puede ofrecer espacios llenos, que se puede hacer escuela fuera de las aulas visitando una fábrica, una editorial, un museo, una orquesta… invitar a la ciudad a ofrecerse a las escuelas con propuestas educativas. «

“Me gusta pensar que se puede hacer escuela fuera de las aulas“

  • ¿Qué propuestas concretas trasladas a quienes te consultan qué medidas se pueden tomar para la vuelta al cole?

«Que los niños se muevan solos. Parece un contrasentido, pero llevamos proponiéndolo muchos años. Si salen solos, será la mitad de la gente la que se mueve. También planteamos que las calles cercanas a las escuelas se cierren al tráfico durante el tiempo de la apertura porque así la escuela puede aprovechar este espacio libre para el descanso, para hacer gimnasia. Ampliando su espacio también se crea un ambiente de respeto urbano.«

«Otra propuesta que avanzo y que ahora tiene un sentido más fuerte es que todos los espacios de los centros se usen para crear laboratorios y talleres y no solo aulas. Hay que renunciar al aula y hacer espacios especializados en algo, en música, ciencia, arte, o tener una huerta como laboratorio de ciencias, por ejemplo, o una cocina.»

“Hay que renunciar al aula y hacer espacios especializados“

«Tendrían que ser grupos que pasan de un lugar a otro y no estar ocho horas sentados en el mismo lugar porque eso ahora mismo, solo por el tema sanitario, no debería estar permitido. Además, un niño que nació bailarín o una niña que nació mecánica no van a encontrar nada que les sugiera que tienen esa vocación. Serán burros en la escuela cuando quizá son genios potenciales en su sector. La escuela correcta debería ayudar a cada uno a buscar lo suyo.«

La semana pasada les comentamos sobre la visión de Tonucci sobre la importancia de conversar con nuestros hijos sobre cómo toda esta situación les a afectado.

Fuente: RTVE, Team La Casa de Tití

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«Hablamos Mucho de los Niños, Pero Muy Poco CON los Niños»

Varias encuestas sobre la cuarentena han concluido 1) que los niños extrañaron a sus amigos, 2) que lo pasaron muy bien con sus padres (como nunca en su vida), y 3) que estaban hartos de los deberes y de las clases virtuales. Para el maestro y pedagogo italiano Francesco Tonucci, es incomprensible que a preguntas como: cómo han vivido los niños el confinamiento, cuáles son las consecuencias que estos meses tendrán en su aprendizaje o cuánto necesitan volver a las aulas, no se han escuchado las respuestas de los propios niños. Tonucci se ha dedicado a escuchar durante toda su vida lo que los niños tienen que decir respecto a las decisiones que les afectan.

Aquí les compartimos algunos extractos de una entrevista realizada por Jessica Martín para RTVE donde Tonucci expone su preocupación sobre cómo se ha manejado la situación de los niños durante la pandemia y ahora el regreso a clases. Un enfoque interesante de analizar.

¿Qué ha pasado con los niños en estos meses de pandemia?

Hablamos mucho de niños, pero muy poco con los niños. Los únicos que están fuera de todos los debates son ellos. Todos los países del mundo ratificaron en la Convención de los Derechos del Niño que tienen derecho a expresarse cada vez que se toman decisiones que les afectan y ahora en nada de lo que se está discutiendo sobre ellos se les consulta.

De varias encuestas que hemos promovido en distintos países extraemos tres conclusiones muy claras: que los niños extrañaron a sus amigos, que lo pasaron muy bien con sus padres (como nunca en su vida), y que estaban hartos de los deberes y de las clases virtuales. 

¿La experiencia del confinamiento les puede haber afectado negativamente?

Siempre hay situaciones complicadas, pero en la mayoría de los casos que nos llegan vemos que ha sido una buena experiencia para los niños. Yo no creo que tengamos que tener miedo a cómo se recuperen porque no considero que el confinamiento haya sido un trauma, por una razón noble y por otra innoble.

La noble es que lo pasaron en casa con sus padres y la innoble es que los niños ya estaban encerrados antes. No es que aprendieran a encerrarse en casa a raíz de la pandemia, es que no podían salir antes tampoco porque los niños hace tiempo que perdieron los espacios públicos. Solo pueden salir si están acompañados por sus padres.

Ahora hay padres preocupados por el desfase curricular, por las carencias en su aprendizaje… ¿entiendes este temor?

Es evidente que lo que la escuela enseñó en este tiempo es muy frágil, es un aprendizaje muy débil. El tema es que no era mucho más fuerte antes (…) Hay un porcentaje muy alto de niños que en la escuela se aburren, que no quieren ir. Y esto no es por culpa del virus.

Pero preguntarse lo que han perdido me parece una forma ridícula. Lo que me gustaría es que se dedicara un tiempo para empezar el nuevo año escolar después de haber analizado lo que los niños han aprendido y lo que han ganado.

¿Qué han aprendido?

Aprendieron a vivir, a reaccionar frente a un bombardeo de noticias horrorosas que todos los días entraban en su casa, a convivir con lutos, o con la enfermedad. Todo esto tiene que entrar en la escuela. No puede ser que la escuela se ocupe de lo otro. Fíjate, la escuela italiana asumió como lema el de «La escuela no para». Esto es absurdo. Si el mundo ha parado, la escuela tiene que parar, porque no parar lo único que significaba es que se seguía con un programa y que, mientras todo el mundo hablaba de un virus en la calle, igual en clase de ciencia se hablaba de la fotosíntesis. 

Nosotros hicimos una propuesta que se llamaba «La casa como laboratorio». Pensamos que si todo se había parado y el mundo de los niños se había restringido a su casa, lo correcto era pedir a los padres que transformaran las actividades domésticas en las nuevas tareas, que los niños cocinaran con sus padres, lavaran la ropa o plancharan. O que les propusieran revisar fotos para reconstruir su historia personal, que tuvieran un diario secreto, que leyeran juntos en familia una novela media hora por día como si fuera un teatro… Y en muchos países se ha hecho.

Estas propuestas nada tienen que ver con ordenadores y tabletas

Es que la tecnología falló totalmente. Los niños no se encontraron con una didáctica a distancia y está claro que el uso de la tecnología para dar clase no funciona, pero tampoco la asistencia presencial es suficiente porque la clase magistral es una forma muy débil de transmisión de conocimiento. Lo que funciona es el conocimiento que desarrollan los alumnos buscando e investigando, no escuchando a los maestros.

“El uso de la tecnología para dar clase no funciona“

Me habría gustado que la escuela al menos usara las plataformas como instrumento para dialogar con los alumnos, para ayudarlos a entender lo que estaba pasando en el mundo y que expresaran sus sentimientos. 

¿Hay algún mensaje que quieras trasladar a los padres?

Yo les diría que hablen con sus hijos, que intenten entender lo que los niños ganaron en este tiempo de clausura, porque seguro que todos ganaron mucho y crecieron mucho. Hay que aconsejar a los padres que se pregunten también ellos qué aprendieron de sus hijos, qué descubrieron que no conocían antes.

Fuente: RTVE, Team La Casa de Tití

Hermanos: un Amor Incondicional (Aunque Peleemos Siempre)

Hoy para celebrar el Día de los Hermanos, continuamos con nuestra serie «Roles de Familia». Los hermanos son un tesoro en la vida, es un amor incondicional, es crecer juntos, es compartir, es pelearse y volverse a contentar. Los hermanos son nuestros primeros amigos con quienes aprendemos a formar nuestros vínculos familiares junto a papá y mamá, son nuestros primeros compañeros. El amor entre hermanos es tan grande y sólido que nos convertimos en cómplices para la vida entera.

¿Qué significa un hermano?

  1. Es tener un compañero de juegos o un cómplice, un confidente o un maestro.
  2. Es compartir no solo juguetes sino también compartir la atención y el amor de padres, abuelos, tíos, primos.
  3. Es aprender de respeto, confianza y camaradería.
  4. Es aprender a ser maestros de los menores y a sentirse bien con ellos mismos por ser un modelo a seguir y su ejemplo.
  5. Es aprender por imitación de los hermanos mayores y muchas veces intentar ser como ellos a quién admiras y respetas.
  6. Es aprender a resolver los conflictos que se generan en el día a día.
  7. Es aprender a negociar, a ceder, a posponer tus necesidades a favor de los demás.
  8. Es ser más generoso y capaz de ponerte en el lugar del otro y comprender lo que necesita.
  9. Es aprender a ser menos egoístas, a ayudar a los demás y a ser más empáticos.
  10. Es aprender de cooperación y colaboración.

Fuente: El Nuevo Diario, Team La Casa de Tití

Debemos ser muy Cuidadosos al Compartir Fotos de Nuestros Hijos en las Redes Sociales

Hoy es el Día Mundial de la Fotografía y hablando sobre el tema, queremos comentarles sobre la preocupante situación que existe en torno a la publicación de fotografías de nuestros niños en las redes sociales. Cantidades de fotos y videos sobre niños y niñas son compartidas a diario en las redes sociales por los padres, representantes, amigos o familiares. Compartir el crecimiento de los hijos y momentos memorables es muy bonito pero podría ser riesgoso: ¿por qué?, ¿qué pasa con esas imágenes?, ¿adónde van a parar?

Existe un término muy utilizado llamado Sharenting que viene de las palabras en inglés share, que significa compartir, y parenting, crianza. Este es un nuevo fenómeno que se conoce como crianza en línea. Algunos estudios consideran que cuando un niño cumple 5 años, sus padres ya compartieron en las redes sociales alrededor de mil fotos del menor. Debemos poner mucho cuidado a esto pues cuando subimos información o imágenes a la web, uno pierde el control sobre ellas. Aún cuando las borres siguen existiendo. Es recomendable siempre utilizar toda la protección, privacidad y seguridad digital que esté al alcance pero igual tratemos de exponerlos lo menos posible.

Los riesgos de compartir fotos y videos

Aunque suene muy alarmista, estas cosas pasan:

  • Las imágenes de los niños puedan ser distribuidas en sitios de pornografía infantil o pedofilia.
  • Pueden ser usadas para secuestros o amenazas y hasta permitan el robo de identidad.
  • No sabemos qué uso puede darle un tercero a las imágenes.
  • Puede impactar en el crecimiento de los niños y adolescentes, en la manera que desarrollan sus vínculos e interactúan con sus pares.

Observaciones de una experta al respecto

Según la psicóloga especialista en infancia, Sonia Almada es muy usual que los niños y niñas a partir de los 7 años comiencen a manifestar su incomodidad en relación a las publicaciones de los padres.

  • “Los adultos muestran a los niños en las redes como un objeto. Parece algo bello y bien intencionado pero no piensan en sus derechos, no piensan en el niño como un sujeto y los chicos no tienen cómo defenderse. Los padres caen en la trampa narcisista de mostrar al niño como un logro, como un trofeo, y no dimensionan los riesgos
  • La especialista aclara que esas fotos que en principio parecen tiernas pueden humillar al niño en el futuro. Lo mismo que las anécdotas divertidas, que luego pueden ser usadas como objeto de burlas. “Son los padres convirtiéndose en bullies”.
  • Aconseja no compartir fotos de los chicos hasta que no tengan edad para opinar y decidir sobre su imagen. “Los padres se enojan cuando se los digo en el consultorio pero si estamos haciendo algo que afecta a los chicos directamente hay que dejar de hacerlo
  • Es necesario un “cambio de narrativa y de mirada” hacia la infancia para que se considere a los niños dueños de sí mismos y no como propiedad de los padres.

Recomendaciones para publicar imágenes de menores

Eduardo Ferreyra, abogado especialista en derechos digitales recomienda atender las siguientes medidas de seguridad digital antes de publicar fotos de niños en las redes sociales.

  • Que la cuenta sea privada y que los contactos o “amigos” se reduzcan a conocidos reales. Una cuenta que tiene más de 600 amigos por ejemplo, es muy probable que ya no sea segura.
  • Evitar subir fotos con información contextual de lugares que frecuentan los niños. Se refiere a la información que puede aportar un uniforme escolar, la entrada de un club o una calle identificable. Estos datos se pueden utilizar para secuestros virtuales u otro tipo de amenazas.
  • Desactivar la ubicación de las aplicaciones y los teléfonos.
  • Evitar subir imágenes que ridiculicen al niño. Algo que a la vista de los adultos puede ser simpático y divertido se puede transformar en objeto de burla en el futuro. Los niños pueden sentirse humillados.
  • Es imposible borrar totalmente una foto que fue compartida en la web. Al interactuar en internet las personas construyen una reputación y algunas fotos pueden traer consecuencias a largo plazo.
  • Si los chicos ya tienen edad preguntarles siempre antes de subir cualquier contenido sobre ellos.

Fuente: El País, Página12, Team La Casa de Tití

Hábitos Para Mejorar el Sueño en Nuestros Niños y en la Familia

Un buen sueño forma parte importante de la salud integral de todos, grandes y chicos. Es muy recomendable que disfrutemos de una buena noche y durmamos profundo, es el sueño reparador. Así evitaremos amanecer cansados, irascibles y de mal humor. Crear los hábitos de dormir para nuestros hijos desde pequeños es primordial. Si hacemos algunos pequeños ajustes en nuestro día a día lo lograremos exitosamente.

Crear un ambiente para que duerman rico

  • Revisen las camas: las sábanas y las almohadas deben ser suaves y cómodas, siempre limpias y frescas. Esto puede tener un gran efecto psicológico e incitar al sueño,
  • Ropa de dormir: las pijamas deben ser preferiblemente de telas de algodón y telas transpirables
  • Eliminen las distracciones: ideal sería sacar la televisión de la habitación de los niños. Así evitaremos que se queden hasta tarde viendo algún programa. Recomiendan no usar ningún aparato electrónico dos horas antes de la hora de dormir.
  • Escuchar música relajante: Quizás lo ayude a conciliar el sueño escuchar sonidos reconfortantes como de la naturaleza o alguna música suave. Mantengan el nivel de ruido bajo.
  • Seguridad y protección: es importante hacerles sentir seguros y protegidos si sienten miedo.
  • Apaguen las luces: la oscuridad promueve el sueño y los niveles saludables de melatonina, una hormona que regula el sueño y el estar despierto.
  • Ambiente fresco: la habitación ventilada con un frescor adecuado promueve el sueño.
  • Un baño relajante: bañar a los niños en la noche con agua tibia para relajarlos y lograr que concilien el sueño más rápido.

Algunas rutinas para dormir y descansar

Crear hábitos o rutinas para inducir el sueño es clave.

  • Cenar liviano y temprano una comida siempre rica y saludable
  • Tomar un baño caliente antes de la hora de dormir.
  • Acostarlos a la misma hora todos los días.
  • Leer o leerles algún cuento o historia que les facilite la transición al sueño.
  • Tratar de que vayan a la cama tranquilos y relajados, que no sientan nuestro estrés y agobio del día.

Consejos durante el día para que logren un buen descanso en la noche

  • Limitar las siestas dependiendo de la edad de los niños. Regular el tiempo de las siestas.
  • Jugar al aire libre a la luz del sol de la mañana; esto ayuda a influenciar a su reloj biológico para que se sienta cansado por la tarde.
  • Hacer actividades deportivas o algún tipo de ejercicio durante el día los puede ayudar a conciliar el sueño en la noche.
  • Limitar el consumo de chocolate de 4 a 6 horas antes de acostarse. y las comidas pesadas, condimentadas o con excesiva azúcar. Es recomendable evitarlas por lo menos 4 horas antes de ir a dormir.
  • Asegúrese de que no estén congestionados, a veces no duermen bien y el sueño no será lo reparador que queremos .

Fuente: Healthy children.com., Council on Communications and Media, Team La Casa de TitÍ.

Un Comentario ‘Inofensivo’ Puede Inhibir la Creatividad de tu Hijo

Todos tenemos la habilidad de ser creativos. La creatividad refuerza el pensamiento crítico y las habilidades en la resolución de problemas. También ayuda a manejar el estrés y a adaptarse a los cambios. Fomentarla en nuestros hijos es vital. Pero, a veces un pequeño e inocente comentario nuestro es más poderoso de lo que imaginamos y puede hacer que coartemos la creatividad natural de nuestros hijos. «La creatividad puede ser fácilmente aplastada por metas impuestas por otros», dice la neurobióloga Erin Clabough Ph.D. Démosles entonces libertad plena a nuestros hijos de ser creativos.

Involuntariamente, la mayoría de nosotros, los adultos, restringimos la creatividad y limitamos la imaginación de los niños. Y se preguntarán cómo es esto posible si esa no es nuestra intención. Pues pongamos atención a los siguientes puntos:

  • Criticar: nuestra crítica debe ser constructiva pero cuidado, a veces no ayuda y podemos coartar su creatividad.
  • Presión a la perfección: es importante poner énfasis en el proceso creativo más que el producto final.
  • Crianza en «helicóptero«: Es bueno darle espacio a nuestros hijos y no aletear alrededor de ellos mientras hacen su proyecto.
  • Restricción de opciones: Debemos dejarlos expresar su creatividad libremente sin restricciones como por ejemplo asignarle el material con que deben pintar. Esto les limita su creatividad.
  • Ser jefe: Dejemos de dar órdenes. No les digamos cómo deben hacerlo.  

Nuestros comentarios pueden aumentar o limitar la imaginación de los niños.

Trabajemos con nuestros hijos en casa para aumentar su creatividad y dejar de limitar su imaginación. Los maestros en la escuela deberían hacer lo mismo.

Son sus ideas no las nuestras

Para fomentar la creatividad en nuestros hijos debemos ponerle cuidado a nuestras propias ideas y formas de pensar. Quizás puedan ser un poco pasadas de moda. Sintonicemos el mundo de ellos hoy y así podremos aceptar más abiertamente sus nuevas ideas.

Haz que tu mundo no sea su mundo

Es importante evitar que nuestros hijos vean el mundo como lo vemos nosotros. Vamos a permitirles la libertad de usar sus propios sentidos y no influyamos en ellos con nuestras sugerencias. Trabajemos con su proceso creativo y no contra él.

Deja de criticar su trabajo

Es importante que nuestros hijos aprendan de sus ensayos y errores. Nuestra crítica constructiva no les brida la ayuda que nosotros creemos. Admiremos su proceso creativo, no el resultado.

No interfieras con su proceso creativo

No nos pongamos en el camino de su juego creativo. Estamos presenciando la imaginación en pleno desarrollo.

Fuente: Lifehack, Team La Casa de Tití

La Inteligencia Emocional es Clave en el Futuro de Nuestros Hijos

Muchos veces los padres nos enfocamos más en los logros académicos de nuestros hijos que en su inteligencia emocional. Sin embargo fomentarla y enseñarles otras habilidades importantes para la vida será imprescindible para su bienestar. Los niños con alta inteligencia emocional tienden a participar más en la escuela, a tener mejores relaciones y a obtener mejores calificaciones según varias investigaciones. De adultos, tienden a tener relaciones de mayor calidad, mejor salud mental y sentimientos más positivos sobre su trabajo.

El psicólogo y periodista Daniel Goleman, popularizó el concepto de inteligencia emocional en su libro de 1995 «Inteligencia emocional: por qué puede importar más que el coeficiente intelectual«. El explica que «en cada uno de nosotros se solapan dos mentes distintas: una que piensa y otra que siente».  Estos tipos de mente son relativamente independientes, con circuitos cerebrales diferentes pero que a la vez están interrelacionadas.

¿Qué es inteligencia emocional?

«Es un conjunto habilidades que nos permite, entre otras cosas, tomar las riendas de nuestros impulsos emocionales, comprender los sentimientos más profundos de nuestros semejantes y manejar amablemente nuestras relaciones». D. Goleman

Hábitos que tienen los niños con EQ altos, según los expertos:

1. Usan su vocabulario para identificar sus emociones

Los niños con alta inteligencia emocional son expertos en reconocer y etiquetar verbalmente sus emociones más allá de lo «bueno» y lo «malo».

2. Y también reconocen esas emociones en los demás.

Los niños emocionalmente inteligentes pueden percibir con precisión cómo se sienten otras personas, a menudo captando señales no verbales.

3. Ven las cosas desde los puntos de vista de otras personas.

Los jóvenes con mayores niveles de inteligencia emocional pueden ponerse en el lugar de otra persona, sentir lo que sienten y ver el mundo desde su perspectiva. Cuando los niños pueden captar la perspectiva de otro, es más probable que sean empáticos, menos críticos y valoren las diferencias.

4. Son rápidos para ayudar a los demás.

Los niños con alta inteligencia emocional tienden a ser más considerados con los demás y buscan formas en que pueden ayudar , ya sea que esto signifique echar una mano por la casa, hacerse amigo del nuevo niño en su clase o pasar tiempo como voluntario los fines de semana. Se centran más en el «nosotros» que en el «yo».

5. Utilizan herramientas para manejar sus emociones.

 Los niños con alta inteligencia emocional están en mejores condiciones para regular sus sentimientos y para no perder el control. Son generalmente menos reactivos e impulsivos. Pueden detenerse antes de actuar según sus emociones. Reconocen sus sentimientos (felices, tristes, enojados, asustados y avergonzados)

6. Se sienten cómodos diciendo «no» a sus compañeros.

Los niños con alta inteligencia emocional son más capaces de establecer e imponer límites personales . Si, por ejemplo, no quieren pelear con un amigo, pueden hablar y expresar ese deseo de una manera firme pero amable. Son respetuosos, asertivos y escuchan sus emociones.

7. Practican la gratitud.

Los niños emocionalmente inteligentes aprenden a estar agradecidos por lo que tienen. No solo dicen «gracias» reflexivamente porque es cortés , sino que se vuelven específicos acerca de por qué están agradecidos.

¿Cuáles son las frases que caracterizan a un niño con inteligencia emocional?

  • ‘Me siento triste porque no puedo salir con mis amigos’
  • ‘Me siento tan emocionado porque compré una bicicleta nueva’
  • ‘Me siento realmente enojado con mi maestro’
  • ‘Me da miedo cuando papá viaja de la noche a la mañana’
  • ‘Ella está sonriendo, apuesto a que está feliz’
  • ‘Su cuerpo está desplomado, tal vez está cansada’
  • ‘Él está llorando: tal vez debería ayudarlo’
  • ‘Necesito un descanso’ en lugar de gritar cuando estoy enojado».

Fuente: Huffpost, PsicoPico, Team La Casa de Tití

Positividad Tóxica: Una Actitud Positiva Excesiva

Ser positivos está bien. Ver el lado positivo de las cosas no es algo malo, pero escuchar nuestras emociones y escucharlas y reconocerlas, aunque sean negativas es muy importante. Intentar ser positivos constantemente es negar muchas veces nuestros sentimientos. El psicólogo Konstantin Lukin nos dice que estas emociones se pueden hacer cada vez mas grandes dentro de nosotros, las vamos acumulando y pueden llegar a convertirse en una situación insostenible. Las psicólogas Samara Quintero y Jamie Long, explican que ser siempre positivos se vuelve negativo cuando esta actitud se usa para reprimir emociones como el resentimiento, tristeza o enojo. Esto puede llegar a ser “tóxico”.

¿Qué es positividad tóxica?

«Es la sobregeneralización excesiva e ineficaz de un estado feliz y optimista en todas las situaciones. El proceso de positividad tóxica resulta en la negación, minimización e invalidación de la auténtica experiencia emocional humana«. Quintero y Long.

Demos un ejemplo

En el caso de la enfermedad por COVID-19, si una persona tiene mucha ansiedad y miedo, ver una actitud de “todo estará bien”, “no pasa nada” o similar por parte de sus seres queridos, puede hacer que se aleje por verla poco accesible emocionalmente o miedo a que rechace sus emociones. “Imagina tratar de tener una relación significativa con alguien que ignora la tristeza o la ansiedad”, dice Lukin.

Signos del positivismo tóxico

  • Escondiendo o enmascarando los verdaderos sentimientos. 
  • Fingiendo que todo está bien.
  • Sentirse culpable de sus emociones negativas.
  • Minimizar las experiencias de otras personas con frases como “todo estará bien”, “hay que ser positivos” o similares.
  • Consolar a otro dándole perspectivas, es decir, diciendo “podría ser peor”, en lugar de validar sus emociones o experiencias.
  • Atacar, humillar o castigar a alguien por expresar frustración, ansiedad, tristeza o cualquier cosa que no sea positividad. 
  • Ignorando los sentimientos diciendo cosas como “así pasa”.

¿Por qué es nociva la Positividad tóxica?

  • Produce vergüenza: esperar a que alguien siempre se encuentre bien o tenga una perspectiva positiva puede alentar al otro a guardar silencio sobre lo que está pasando o sintiendo.
  • Suprime las emociones: negar los sentimientos u ocultarlos puede producir estrés. En la vida hay momentos tristes, dolorosos y difíciles.
  • Produce aislamiento: crearse una personalidad falsa, presentarse como alguien positivo y alegre, puede llevar a que se pierda la conexión con uno mismo, y con los demás, provocando aislamiento. 

¿Cómo evitar el positivismo tóxico?

Aceptar que existen emociones negativas ayudará a sobrellevarlas y a disminuir su intensidad. Lukin nos dice que al compartirlas, las podemos procesar y puede llevarnos a ser más abiertos con nuestros seres queridos. Hablar de cómo nos sentimos, en lugar de siempre pretender que todo está bien. Hablar de nuestros sentimientos con otra persona puede ayudarnos a encontrar confort o apoyo, en lugar de rechazo.

Hablemos con nuestros hijos

Es muy importante hablar con nuestros hijos sobre nuestros sentimientos y emociones. Dejarles saber lo que sentimos hará que ellos mismos se sientan en confianza para expresar sus propios sentimientos. Hay momentos en que se pueden sentir tristes, disgustados o felices y eso está bien. Compartiendo esas emociones con nosotros los podemos ayudar a sobrellevar mejor cualquier situación y a medida que vayan creciendo serán capaces de manifestar y expresar libremente sus sentimientos a otros. No debemos negar ni reprimir lo que sentimos.

Fuente: Observatorio Tec. Monterrey, Team Casa de Tití

Primos: Amigos y Hermanos

Continuando con nuestra serie «Roles de Familia, hablaremos hoy sobre los primos. Los primos juegan un papel importantísimo en la vida de los niños. No solo porque aprenden a darle valor al papel de la familia sino que cuando los primos se llevan bien y tienen una sólida relación, se convierten en grandes amigos y cómplices. Para nuestros hijos será una fortuna crecer cerca de sus primos. Les hará darse cuenta de lo importante que es tener a seres queridos al lado y saber que pueden contar con ellos en las buenas y en las malas. Son apoyos que se tienen cuando se necesitan, son incondicionales.

Compañeros de juego

Los primos pueden llegar a ser grandes compañeros de juego. Cuando se hacen reuniones familiares pasan ratos compartiendo, jugando y divertiéndose en grande. Estos momentos serán especiales en sus vidas. Juntos tendrán travesuras, andanzas y luego tendrán muchas anécdotas que contar. Se forja una relación especial entre ellos y guardarán momentos inolvidables de su infancia.

Crecer con primos también los ayuda a aprender a compartir, no solo juguetes sino a compartir a los abuelos y los tíos. Los lazos familiares, que son tan importantes en la vida de los niños, se estrecharán. Las reuniones donde se reúnan abuelos, tíos, primos, será una oportunidad más para aprender a valorar y fortalecer las relaciones familiares.

Amigos y hermanos

En los primos encontrarán no solo a los mejores amigos sino también incluso a hermanos. Es muy importante que los padres apoyen esta relación familiar para que se fortalezca. Y es que son muchas las ocasiones en las que los primos llegan a sentirse de manera tan especial que pasan a ser pilares fundamentales de la vida.

Si desde pequeños tienen el cariño y el amor de los tíos imaginen que relación existirá con los hijos de éstos. Muchas veces sus primos son sus primeros amigos. Se convierten en los mejores compañeros de juegos, en cómplices y en hermanos de corazón.

Fuente: OK Diario, Team La Casa de Tití

Actividades Recomendadas Para Niños Con Déficit de Atención

Los expertos recomiendan a los padres, cuyos hijos han sido diagnosticados con Déficit de Atención, la práctica de actividades fuera de las horas de escuela donde puedan drenar toda su energía y aprendan a controlar sus impulsos. Actividades que requieran concentración y desarrollo de sus capacidades cognitivas. Pero no todas las actividades son para todos los niños. Debemos escoger las que verdaderamente disfruten para así sacarle el mayor provecho y que sea beneficioso para ellos. Aquí les presentamos algunas actividades recomendadas por la neuropsicóloga María José Acebes y Marta Calderero, profesora de Psicología y Ciencias de la Educación.

Actividades ideales para trabajar la concentración y control de impulsos

Música

Aprender a tocar un instrumento, así como leer y componer nuevas piezas musicales es especialmente beneficioso. La relación entre la música y la génesis de neuronas y de asociaciones entre ellas proporciona habilidades cognitivas fundamentales para revertir alteraciones de las conductas propias de TDAH.

Jugar con perros

La terapia asistida con perros los puede ayudar a mejorar sus habilidades sociales y a reducir las conductas problemáticas. Presentan un aumento de la capacidad de atención y progresos notables en las relaciones con los demás.

Jugar con perros ayuda al niño a ser más consciente de los momentos en los que pierde la atención o se comporta de manera impulsiva; su perro reacciona ante estos comportamientos y esto lo ayuda a corregir la conducta al momento y mejorará a largo plazo.

Deporte

La práctica diaria de deporte beneficia la cognición y el comportamiento respecto a su aprendizaje. Es fundamental que haga actividad física regularmente.

Si durante unos 20 minutos realizan una actividad física de alta intensidad, su velocidad de procesamiento y su memoria de trabajo mejoran, así como también sus habilidades de planificación y de resolución de problemas.

Lamentablemente, a medida que el niño se va haciendo mayor, y si sus calificaciones van empeorando, algunos padres optan por retirarlo de las actividades extraescolares deportivas y las sustituyen por clases de refuerzo de la materia suspendida.

Mindfulness y Yoga

Disciplinas como el mindfulness y el yoga entrenan a los niños en el reconocimiento de sus emociones, les ayudan a centrar la atención, a estar tranquilos y a aprender a estarse quietos. La conciencia plena (mindfulness) reduce la inatención, la hiperactividad, la impulsividad y la desregulación emocional de los niños.

Ajedrez

El ajedrez es una actividad que requiere mucha concentración. Quizá por ello pueda parecer contraproducente. Sin embargo, siempre y cuando se ponga en práctica en un contexto terapéutico y supervisado por profesionales, se ha revelado como un ejercicio altamente eficaz en el tratamiento de este trastorno.

El ajedrez permite trabajar la inteligencia logicomatemática y crear hábitos positivos durante el juego, los cuales más tarde pueden ser aplicados en otros contextos de la vida diaria.

Artes Plásticas

Los niños con TDAH tienen una especial tendencia a la creatividad. Se recomienda las terapias relacionadas con técnicas plásticas. Son estimulantes y motivantes. Las disciplinas artísticas requieren concentración y una combinación de diferentes capacidades orientadas a la ejecución de un plan y la obtención de un resultado.

Fuente: La Vanguardia